Nos trazamos metas, nos esforzamos por cumplirlas, por llegar a ser lo que se espera que seamos, lo que nosotros mismos esperamos ser! Días y noches en vela, sin descanso, con la mente a punto de estallar, mientras otra parte de nuestro ser nos hace seguir. Y en medio de esa guerra, avanzamos.
Los esfuerzos que uno hace, los otros no pueden medirlos; los demás sólo ven resultados. Están de observadores lejanos y objetivos. Y creen que pueden sentarse a juzgar y a poner en balanzas: si el resultado ha sido bueno, es que se esforzó, caso contrario, no hizo lo suficiente. ¿Quienes son ellos para decidirlo? Quizás y hayan pasado por la misma situación o similar, pero eso no implica que entiendan, porque cada persona es diferente y no todas aprenden de la misma forma.
Y bien, todo esto pasa. Con el tiempo uno aprende a no escuchar a aquellas voces que proclaman su apoyo incondicional, cuando la realidad es que, ese apoyo se limita a la comodidad de quien lo brinde, porque nunca esperan que uno les vaya a pedir más de lo que pueden dar sentados cómodamente en un sillón.
Llegará el día en que todo eso acabe, que por fin se llegue a la meta tan esperada; que el título, las medallas, los aplausos y el famoso cartón adornado con letras y sellos significativos para una sociedad costumbrista, llegue a las manos de quien tanto lo deseó y soñó en las pocas noches que pudo dormir tranquilo.
¿Y después de eso que? Siempre me pregunto eso. Todo ese esfuerzo, dedicación... ¿para qué? para luego ser esclavos del sistema capitalista que dice que el que más trabaje más gana y mejor está. Nos explotaremos a nosotros mismos día y noche en una empresa whatever, dando buen uso a nuestro conocimiento, sí; pero, y el tiempo para disfrutar?
Por años, me convencieron con la idea de que cuando me graduara de la universidad llegaría mi momento de disfrutar de los placeres de la vida; que mientras siga siendo una corriente estudiante mantenida por sus padres, se hace lo que ellos digan. Que cuando te gradués tendrás tu dinero, tu casa y podrás hacer tus reglas y vivir como se te de la gana. Por años, esta ilusión fue la que me hizo no dormirme sobre mis cuadernos estudiando para un exámen. Fue esa idea la que no me dejaba tirar la toalla a pesar del cansancio.
Pero después empecé a pensar: y lo que viene? Si bien es cierto, ya no tendré que desvelarme estudiando para un exámen, quizás me toque desvelarme para solucionar un problema. Tal vez ya no tenga tareas para entregar al día siguiente, pero tendré que entregar reportes, cálculos, etc. Y lo más "bonito", en clases si cometes algún error, puedes volver a intentarlo al día siguiente, pero en la realidad cuando estás a segundos de ser asesinado o ver a un amigo morir... (ok, eso fue de Harry Potter y la Orden del Fénix). El punto es que una vez afuera, todo se torna peor.
Habrá más responsabilidades y obligaciones, ya no velarás por tí mismo, sino por unos cuantos más a tu cargo. Las vacaciones ya no vendrán de 2 o 3 meses al año, sino será una semana al año a lo mucho. Ya no podrás faltar a las 7 por desvelarte por estudiar para un examen a las 10, ahora de ley tendrás que ir todos los días al trabajo, a las 8. Día tras día, la misma rutina.
Suena fatalista, pero a veces me pongo a pensar si de verdad mi vida será así cuando salga de la universidad. No quiero ser una de esas que se pasan de 8 a 6 trabajando, con media hora de almuerzo a la 1 y que salen de vacaciones una vez al año. Todo por ganarse un bendito sueldo para vivir... "trabajar como negro, para vivir como perro"
¿Por qué nos criaron con una mente cerrada y una visión de un sólo camino por seguir? Nos metieron en la cabeza el miedo a escoger una carrera artística o simplemente diferente, porque así nos vamos a morir de hambre, porque de eso no se puede vivir, porque tienes que escoger una profesión que te sirva para ser alguien en la vida...
A veces me gustaría saber que tengo otras opciones. Que un día podré coger mis cuatro teleras y largarme lejos, conociendo lugares y gente nueva... conociendo culturas diferentes y disfrutar de la vida en el mar, en las montañas, en el desierto. Tomar un carro y recorrer mil lugares, trabajando con gente en lugares donde se necesite realmente...
Quizás, quizás... quizás si pueda hacerlo... quizás una parte de mi profesión me lleve hasta allá. Siempre que no siga con las ataduras antes impuestas por aquellos que prometieron dejarme ser libre, pero que nunca fue así...
**Siempre has soñado con poder salir de tu cárcel de cristal (...) Hoy tus barrotes que hacen tu prisión son el miedo a fracasar, son invisibles, son disfraces con el que adornaron tu hogar.
**Canción de Mago de Oz.
miércoles, 23 de septiembre de 2009
sábado, 22 de agosto de 2009
Decisiones
Tragando palabras te vas dando cuenta
Que a veces lo lógico es lo más difícil
Y poquito a poco te vas acercando al fuego
A la llama que quema a las mariposas
Azules y blancas entre las cenizas
Las alas sin vida de vuelos suicidas
Y yo las entiendo porque yo he sentido
La luz cegadora de un fuego prohibido
Y es asi...
Como se va enredando el cuento
Como se va torciendo el tiempo
Como te quedas ciego
Y es asi, y es asi, y es asi
Como te vas creyendo tus propias mentiras
Y luego el silencio se vuelve un lamento de guerras perdidas
De guerras perdidas
Quien pudo ser tan ciego para chocar
De frente contra el fuego como mariposas
Quien pudo ser tan loco para cambiar
El sol de la mañana por la llama
De un fuego cualquiera
Por decirlo así.
De una guerra perdida que yo viví
De una guerra que vuelvo yo a vivir
¿Que esta canción no tiene nada que ver con las decisiones? Mírenla bien.
Decisiones, todo en esta vida son decisiones. Lo demás sólo viene por añadidura y consecuencia de lo que decidimos.
Decisiones buenas, decisiones malas.
Decisiones malas: a veces lo lógico es lo más difícil, y somos tan ciegos como para no darnos cuenta de que el camino elegido nos vamos a estrellar. No importa cuantas veces nos digan que ese camino está mal, a veces la propia necedad nos lleva a seguir adelante. Suena trágico, pero es así, para aquellos que no alcanzamos a ver más allá de nuestra propia conciencia… Y perdemos guerras, morimos quemados.
¿Cuál es el sol y cual es la luz cualquiera? Para empezar, habría que tener una clara idea de cuál es cual, pues sin conocer las opciones, tendemos a equivocarnos.
¿De qué depende? De los gustos, las necesidades… de cada uno de nosotros a fin de cuentas.
Que a veces lo lógico es lo más difícil
Y poquito a poco te vas acercando al fuego
A la llama que quema a las mariposas
Azules y blancas entre las cenizas
Las alas sin vida de vuelos suicidas
Y yo las entiendo porque yo he sentido
La luz cegadora de un fuego prohibido
Y es asi...
Como se va enredando el cuento
Como se va torciendo el tiempo
Como te quedas ciego
Y es asi, y es asi, y es asi
Como te vas creyendo tus propias mentiras
Y luego el silencio se vuelve un lamento de guerras perdidas
De guerras perdidas
Quien pudo ser tan ciego para chocar
De frente contra el fuego como mariposas
Quien pudo ser tan loco para cambiar
El sol de la mañana por la llama
De un fuego cualquiera
Por decirlo así.
De una guerra perdida que yo viví
De una guerra que vuelvo yo a vivir
¿Que esta canción no tiene nada que ver con las decisiones? Mírenla bien.
Decisiones, todo en esta vida son decisiones. Lo demás sólo viene por añadidura y consecuencia de lo que decidimos.
Decisiones buenas, decisiones malas.
Decisiones malas: a veces lo lógico es lo más difícil, y somos tan ciegos como para no darnos cuenta de que el camino elegido nos vamos a estrellar. No importa cuantas veces nos digan que ese camino está mal, a veces la propia necedad nos lleva a seguir adelante. Suena trágico, pero es así, para aquellos que no alcanzamos a ver más allá de nuestra propia conciencia… Y perdemos guerras, morimos quemados.
¿Cuál es el sol y cual es la luz cualquiera? Para empezar, habría que tener una clara idea de cuál es cual, pues sin conocer las opciones, tendemos a equivocarnos.
¿De qué depende? De los gustos, las necesidades… de cada uno de nosotros a fin de cuentas.
sábado, 13 de junio de 2009
Tic tac... el tiempo vuela...
Tic tac, es tu joven corazón
Tic tac buscando el amor
Tic tac escucha de cerca el sudor
Tic tac no sabes aun querer
Tic tac duermes de pie
Tic tac es tu corazón que hace
Tic tac, tic tac en la pared
Pero al amor no basta con darle cuerda y mirarlo
No esperes mas a las agujas que a ellas no les importas tu ni nadie
Es un reloj roto
Tu corazón solo
Es un reloj que hay que poner en hora
Para que no llegue tarde al amor esta vez
Tic tac ríes nervioso hacia ver
Tic tac que te quiere ver
Tic tac si suena todo a la mar
Tic tac es tu joven corazón
Tic tac buscando el amor
Tic tac es tu corazón que hace
Tic tac, tic tac en la pared
¿Quién define si vamos rápido o vamos lento? ¿Quién define si es mucho o si es poco el tiempo que esperamos por algo? Si hay algo que he aprendido ultimamente, es que esa frase de “no esperes más a las agujas, que a ellas no les importas tu ni nadie” muchos se la toman muy a pecho. Son aquellos que creen que no tienen tiempo y su reloj marca tic tac, tic tac desesperantemente, cada vez más y más rápido, como una bomba de tiempo a punto de estallar.
¿Y qué hay de los que estamos a gusto con nuestro ritmo de reloj? Aquellos que nos sentimos tranquilos escuchando ese suave y despacio tic – tac... que vivimos sin pausa, pero sin prisa, que no nos debemos al tiempo… ¿Tenemos que acelerarlo al ritmo de los otros? No lo creo.
Tiempo… Es una palabra que empieza y que se acaba
No se debe ni se termina
Que corre despacio y que pasa de prisa
Despacio pasan las horas cuando quiero tener sueño
Cuando es un sueño que quiero, las horas pasan corriendo
Si me ven que estoy divagando mucho sobre este tema, es porque aun no tengo claro, si quiero que el tiempo pase más lento o más despacio.
Es que, partiendo de lo más básico: cuando lo estamos pasando bien, el tiempo se va volando, (y en estas cuestiones, es cuando quisiera que pase más lento) pero el mismo tiempo en una aburrida sala de clases parece eterno (y aquí quisiera que vaya más rápido). Eso por hablar de lo básico y nada más. Hablando más allá, el tiempo de ser joven, de hacer tonteras, locuras y demás a veces no parece suficiente, quizás aun no hemos hecho todo lo que queremos hacer, pero a ó b circunstancias nos obligan a crecer rápido, y a hacer que ese tiempo vuele o simplemente se esfume.
Ser joven es tan chévere después de todo: no tienes nada de qué preocuparte más que de ti mismo, de sembrar lo que quieres cosechar en el futuro, en TU futuro, y eso es algo de cada uno: quien quiera cosechar manzanas que no siembre limones pues… (ok… eso fue agrio, pero espero que entiendan por qué lo digo). Escoge bien que siembras, nada más.
Pero de mayor… chuta… en el momento que empieces a formar tu familia, ya no eres responsable sólo de ti, sino de otros seres más. Habrá personitas que dependan de tus cuidados y de lo que le des. ¿Qué vas dar si no sembraste nada? Si no tienes nada en qué apoyarte, ¿qué vas a hacer?
No, no… Me niego a ser mayor. Esta etapa es la mejor. Obvio, tiene ciertas desventajas, como todo, pero prefiero esto a las desventajas de tener alguien más por quien responsabilizarme. Quizás suene egoísta e inmaduro, sé que hay miles de personas que lo hacen todo el tiempo, y lo hacen bien y realmente los aplaudo, pero es mi punto de vista por ahora, quizás más delante de verdad crezca y vea las cosas desde otro punto de vista, lo que me lleva a la conclusión de que, como el título de este blog, de según como se mire todo depende. ¿Y de qué depende cómo se mire? En esta cuestión, depende del tiempo. Bendito y maldito tiempo.
Tic tac buscando el amor
Tic tac escucha de cerca el sudor
Tic tac no sabes aun querer
Tic tac duermes de pie
Tic tac es tu corazón que hace
Tic tac, tic tac en la pared
Pero al amor no basta con darle cuerda y mirarlo
No esperes mas a las agujas que a ellas no les importas tu ni nadie
Es un reloj roto
Tu corazón solo
Es un reloj que hay que poner en hora
Para que no llegue tarde al amor esta vez
Tic tac ríes nervioso hacia ver
Tic tac que te quiere ver
Tic tac si suena todo a la mar
Tic tac es tu joven corazón
Tic tac buscando el amor
Tic tac es tu corazón que hace
Tic tac, tic tac en la pared
¿Quién define si vamos rápido o vamos lento? ¿Quién define si es mucho o si es poco el tiempo que esperamos por algo? Si hay algo que he aprendido ultimamente, es que esa frase de “no esperes más a las agujas, que a ellas no les importas tu ni nadie” muchos se la toman muy a pecho. Son aquellos que creen que no tienen tiempo y su reloj marca tic tac, tic tac desesperantemente, cada vez más y más rápido, como una bomba de tiempo a punto de estallar.
¿Y qué hay de los que estamos a gusto con nuestro ritmo de reloj? Aquellos que nos sentimos tranquilos escuchando ese suave y despacio tic – tac... que vivimos sin pausa, pero sin prisa, que no nos debemos al tiempo… ¿Tenemos que acelerarlo al ritmo de los otros? No lo creo.
Tiempo… Es una palabra que empieza y que se acaba
No se debe ni se termina
Que corre despacio y que pasa de prisa
Despacio pasan las horas cuando quiero tener sueño
Cuando es un sueño que quiero, las horas pasan corriendo
Si me ven que estoy divagando mucho sobre este tema, es porque aun no tengo claro, si quiero que el tiempo pase más lento o más despacio.
Es que, partiendo de lo más básico: cuando lo estamos pasando bien, el tiempo se va volando, (y en estas cuestiones, es cuando quisiera que pase más lento) pero el mismo tiempo en una aburrida sala de clases parece eterno (y aquí quisiera que vaya más rápido). Eso por hablar de lo básico y nada más. Hablando más allá, el tiempo de ser joven, de hacer tonteras, locuras y demás a veces no parece suficiente, quizás aun no hemos hecho todo lo que queremos hacer, pero a ó b circunstancias nos obligan a crecer rápido, y a hacer que ese tiempo vuele o simplemente se esfume.
Ser joven es tan chévere después de todo: no tienes nada de qué preocuparte más que de ti mismo, de sembrar lo que quieres cosechar en el futuro, en TU futuro, y eso es algo de cada uno: quien quiera cosechar manzanas que no siembre limones pues… (ok… eso fue agrio, pero espero que entiendan por qué lo digo). Escoge bien que siembras, nada más.
Pero de mayor… chuta… en el momento que empieces a formar tu familia, ya no eres responsable sólo de ti, sino de otros seres más. Habrá personitas que dependan de tus cuidados y de lo que le des. ¿Qué vas dar si no sembraste nada? Si no tienes nada en qué apoyarte, ¿qué vas a hacer?
No, no… Me niego a ser mayor. Esta etapa es la mejor. Obvio, tiene ciertas desventajas, como todo, pero prefiero esto a las desventajas de tener alguien más por quien responsabilizarme. Quizás suene egoísta e inmaduro, sé que hay miles de personas que lo hacen todo el tiempo, y lo hacen bien y realmente los aplaudo, pero es mi punto de vista por ahora, quizás más delante de verdad crezca y vea las cosas desde otro punto de vista, lo que me lleva a la conclusión de que, como el título de este blog, de según como se mire todo depende. ¿Y de qué depende cómo se mire? En esta cuestión, depende del tiempo. Bendito y maldito tiempo.
sábado, 16 de mayo de 2009
El poder de las palabras
Las palabras fueron avispas y las calles como dunas. Es increíble el poder que tienen las palabras. Sé que alguna vez leí sobre eso y sin embargo, no lo puedo aplicar fácilmente.
Que con solo UNA palabra podemos sanar heridas o provocarlas. Con una palabra podemos hacer amigos, o ganarnos enemigos.
Si cortamos una hoja de papel, por mas que la peguemos, no volverá a ser igual, sus moléculas no volverán a estar en el mismo orden en q estaban antes. Sin embargo, si se hace todo un proceso de reciclaje se puede volver a tener una hoja de una sola pieza molecularmente unida.
Esto nada que ver tiene con la ecología, pero, podríamos hacer un reciclaje de las cosas que nos llevaron hasta aquí? Volver a crear una hoja tan unida como estaba antes de romperla.
Que con solo UNA palabra podemos sanar heridas o provocarlas. Con una palabra podemos hacer amigos, o ganarnos enemigos.
Si cortamos una hoja de papel, por mas que la peguemos, no volverá a ser igual, sus moléculas no volverán a estar en el mismo orden en q estaban antes. Sin embargo, si se hace todo un proceso de reciclaje se puede volver a tener una hoja de una sola pieza molecularmente unida.
Esto nada que ver tiene con la ecología, pero, podríamos hacer un reciclaje de las cosas que nos llevaron hasta aquí? Volver a crear una hoja tan unida como estaba antes de romperla.
jueves, 30 de abril de 2009
Que pueda contar contigo... Penas y alegrías.
Tal vez es que cuando uno pasa sumergido en sus propias preocupaciones, no se da cuenta del daño que puede estar haciendo a quienes lo rodean, a quienes lo observan, no por curiosos, sino por genuina preocupación.
Alguien, que hasta hace un corto tiempo consideraba como muy sabia, me dijo alguna vez: "una tristeza compartida es la mitad de la tristeza, y una alegría compartida es el doble de alegría". Es un consejo que siempre llevo en mi mente y algo que le digo a mis amigos para que sepan que yo siempre estaré ahí, para reír, para llorar, pueden contar conmigo. Como dice la canción "Que pueda contar contigo, como sabes que conmigo siempre puedes... que no cuente la suerte, solo el destino que nos presentó".
¡Y resulta tan fácil compartir las alegrías! Porque se entiende que las alegrías se dan porque algo bueno ha sucedido, o al menos así lo creo yo, tal vez haya sus excepciones... sin embargo, con las tristezas no es tan fácil. ¿Por qué no?
A menudo nos sentimos tristes cuando nuestras expectativas no se ven cumplidas, cuando las circunstancias de la vida son más dolorosas que alegres, etc... en cualquier caso, cuando se dan cuestiones desfavorables. Excepto por unos cuantos que les gusta hacerse los mártires ante cualquier mínima adversidad que se le venga, ¿a quién le gusta que lo vean mal, que lo vean llorar?
Ah! Llorar para algunos es de lo peor... "Nadie me ve llorar" ¿Por qué? "Es símbolo de debilidad ante los demás". Estoy de acuerdo que no podemos andar por ahí llorando a mares mientras pasamos por la calle, y en definitiva, si vas a llorar con alguien es mejor que sepas con quién hacerlo. Pero a veces nos cuesta abrirnos incluso con nuestros amigos más cercanos, con nuestras parejas, con nuestra familia. En cualquier caso, terminas tragándote tú solo tus lágrimas.
Compartir la tristeza, y eso lo reduce a la mitad. Alguna vez le dije esa frase a un amigo muy politécnico y me salió con la diferenciacion y la integración... pero bueno, eso no viene al caso.
Compartir la tristeza no es tan fácil, porque creo yo, que muchas veces tenemos que procesarla primero. Como me decía mi amigo, el politécnico, cuando la vida te da un golpe, lo primero es recibir el golpe, vivir el dolor, y por ultimo decidir salir del golpe. Después de estas tres etapas es cuando por fin pasa. Hay quienes prefieren pretender que el golpe nunca se dio, pero... tal vez podamos deshacernos momentáneamente del asunto, pero llegará un punto en que regresará con toda su fuerza y nos volverá a golpear. Poner parches no soluciona el problema, hay que tratarlo y eliminarlo. El proceso de asimilarlo depende de la intensidad del golpe y por su puesto, de la persona y su voluntad.
Y en ese proceso, muchas veces nos encerramos dentro de nosotros mismos y no nos damos cuenta que por fuera hay personas que nos ven y debido a su cercanía con nosotros pueden percibir fácilmente que algo sucede. ¿Y qué es lo primero que decimos cuando alguien nos pregunta "¿Qué te ocurre?"? "¡¡Nada!!" Y nos volvemos huraños, andamos tensos, por todo explotamos y en esas explosiones, los que estan cerca resultan afectados.
Y es así hasta que por fin terminamos de procesar el asunto, y llega el momento de sacarlo. Cada uno tiene su manera de hacerlo, y ojalá, con quien hacerlo (sino con quien compartimos?). Por mi parte agradezco infinitamente a esa persona tan paciente. No digo más porque no quiero apuntar, pero podría extender bastante este párrafo.
**Que no sea todo mentira o en su defecto no lo parezca. Que no aumente la ceguera de los que están siempre arriba. Que no haya pasión que no valga. Que no haya mal que cien años dure.
Que pueda aguantar la cordura sin caer de rodillas. Que no cambien a su modo un episodio de historias. Que las buenas voluntades no sean tan diferentes, que yo no siga la corriente, que me lo dices siempre. Tanto control, tanta precaución... Pero sobre todo:
Que pueda contar contigo... Sé que puedo. Sé que estarás ahí. Y sabes que conmigo siempre puedes. Que no cuente la suerte, solo el destino que nos presento.
(** Frases de una canción. Contar Contigo de Enrique Bunbury. Algo modificadas por cierto)
Alguien, que hasta hace un corto tiempo consideraba como muy sabia, me dijo alguna vez: "una tristeza compartida es la mitad de la tristeza, y una alegría compartida es el doble de alegría". Es un consejo que siempre llevo en mi mente y algo que le digo a mis amigos para que sepan que yo siempre estaré ahí, para reír, para llorar, pueden contar conmigo. Como dice la canción "Que pueda contar contigo, como sabes que conmigo siempre puedes... que no cuente la suerte, solo el destino que nos presentó".
¡Y resulta tan fácil compartir las alegrías! Porque se entiende que las alegrías se dan porque algo bueno ha sucedido, o al menos así lo creo yo, tal vez haya sus excepciones... sin embargo, con las tristezas no es tan fácil. ¿Por qué no?
A menudo nos sentimos tristes cuando nuestras expectativas no se ven cumplidas, cuando las circunstancias de la vida son más dolorosas que alegres, etc... en cualquier caso, cuando se dan cuestiones desfavorables. Excepto por unos cuantos que les gusta hacerse los mártires ante cualquier mínima adversidad que se le venga, ¿a quién le gusta que lo vean mal, que lo vean llorar?
Ah! Llorar para algunos es de lo peor... "Nadie me ve llorar" ¿Por qué? "Es símbolo de debilidad ante los demás". Estoy de acuerdo que no podemos andar por ahí llorando a mares mientras pasamos por la calle, y en definitiva, si vas a llorar con alguien es mejor que sepas con quién hacerlo. Pero a veces nos cuesta abrirnos incluso con nuestros amigos más cercanos, con nuestras parejas, con nuestra familia. En cualquier caso, terminas tragándote tú solo tus lágrimas.
Compartir la tristeza, y eso lo reduce a la mitad. Alguna vez le dije esa frase a un amigo muy politécnico y me salió con la diferenciacion y la integración... pero bueno, eso no viene al caso.
Compartir la tristeza no es tan fácil, porque creo yo, que muchas veces tenemos que procesarla primero. Como me decía mi amigo, el politécnico, cuando la vida te da un golpe, lo primero es recibir el golpe, vivir el dolor, y por ultimo decidir salir del golpe. Después de estas tres etapas es cuando por fin pasa. Hay quienes prefieren pretender que el golpe nunca se dio, pero... tal vez podamos deshacernos momentáneamente del asunto, pero llegará un punto en que regresará con toda su fuerza y nos volverá a golpear. Poner parches no soluciona el problema, hay que tratarlo y eliminarlo. El proceso de asimilarlo depende de la intensidad del golpe y por su puesto, de la persona y su voluntad.
Y en ese proceso, muchas veces nos encerramos dentro de nosotros mismos y no nos damos cuenta que por fuera hay personas que nos ven y debido a su cercanía con nosotros pueden percibir fácilmente que algo sucede. ¿Y qué es lo primero que decimos cuando alguien nos pregunta "¿Qué te ocurre?"? "¡¡Nada!!" Y nos volvemos huraños, andamos tensos, por todo explotamos y en esas explosiones, los que estan cerca resultan afectados.
Y es así hasta que por fin terminamos de procesar el asunto, y llega el momento de sacarlo. Cada uno tiene su manera de hacerlo, y ojalá, con quien hacerlo (sino con quien compartimos?). Por mi parte agradezco infinitamente a esa persona tan paciente. No digo más porque no quiero apuntar, pero podría extender bastante este párrafo.
**Que no sea todo mentira o en su defecto no lo parezca. Que no aumente la ceguera de los que están siempre arriba. Que no haya pasión que no valga. Que no haya mal que cien años dure.
Que pueda aguantar la cordura sin caer de rodillas. Que no cambien a su modo un episodio de historias. Que las buenas voluntades no sean tan diferentes, que yo no siga la corriente, que me lo dices siempre. Tanto control, tanta precaución... Pero sobre todo:
Que pueda contar contigo... Sé que puedo. Sé que estarás ahí. Y sabes que conmigo siempre puedes. Que no cuente la suerte, solo el destino que nos presento.
(** Frases de una canción. Contar Contigo de Enrique Bunbury. Algo modificadas por cierto)
lunes, 13 de abril de 2009
Extrañando a un amigo en su cumpleaños
Hoy deberia estar llamando a un amigo a su casa para decirle FELIZ CUMPLEAÑOS. Lamentablemente no puedo hacerlo porque el ya no esta ahi... ya no esta en este mundo terrenal...
El y yo teniamos tiempo sin saber el uno del otro. Por diversas cuestiones de la vida perdimos contacto durante un tiempo... yo ni siquiera tenia su numero de celular!! Pero pocas semanas antes de que sucediera lo que sucedio, le habia llamado a su casa, y esperabamos vernos pronto... Pero no pense que cuando lo viera, seria tb la ultima vez... no pense que nos encontrariamos asi. Yo vestida de negro y el en un ataud.
Tal vez el y yo no hayamos sido los mejores amigos del mundo... pero hubo un tiempo en que lo conoci, en que conversamos bastante y sobre todo, lo pasabamos bien.
El siempre venia a mis cumpleaños... cuando los amigos me caian en mi casa con guitarras y musica y nos quedabamos ahi... Despues cuando tuve que irme a estudiar, el me mandaba en mi cumpleaños alguna tarjeta por mail... y a veces ni en mi cumpleaños. Era su manera de decirme que siempre estaba ahi...
Alguna vez, yo tambien hice lo mismo. Escribiendole por mail, mandandole tarjetas. Y en esta fecha como sea, por el medio que fuera, le decia FELIZ CUMPLEAÑOS
Hoy, el primer cumpleaños de el desde que se fue, empleo este medio para decirselo. Si no me equivoco estaria cumpliendo 24 años, pero lamentablemente tuvo que irse antes de tiempo, antes de lo que cualquiera de nosotros esperaria y de una forma muy violenta e inesperada.
Se que el sabe que me estoy acordando de el. Donde quiera que estes amiwito... te quiero mucho y nunca te olvidare.
sábado, 11 de abril de 2009
La mania de ocultar lo que sentimos. Necedad
Por que? Por que poner la excusa de que no queremos lastimar a la otra persona, cuando en realidad lo que no queremos es salir lastimados nosotros mismos?
Por que decir “prefiero no discutir esto” cuando en realidad sí se quiere discutirlo? Saben por que lo digo? Porque si no se quisiera discutir algo ni siquiera hubiera salido dejado asomarse. Cuando en verdad no quieres discutir algo no lo dejas ni asomarse… pero dejarlo asomarse es una provocación y dsps te haces el que la quieres evitar…
Por que la necedad de quedarse callado cuando es tan obvio que hay algo ahí dentro que te mueres por decir??
Quien es mas necio? El que discute diciendo que no le pasa nada cuando es obvio que si le pasa algo o el que pregunta aun cuando le han dicho que no pasa nada??
Les dejo unas frases sobre la necedad…
Decimos una necedad y a fuerza de repetirla acabamos creyéndola.
Voltaire (1694-1778) Filósofo y escritor francés.
No hay cosa más difícil, bien mirado, que conocer a un necio si es callado.
Alonso de Ercilla y Zúñiga (1533-1594) Escritor español.
Una necedad, aunque la repitan millones de bocas, no dejan de ser una necedad.
Anatole France (1844-1924) Escritor francés.
Por que decir “prefiero no discutir esto” cuando en realidad sí se quiere discutirlo? Saben por que lo digo? Porque si no se quisiera discutir algo ni siquiera hubiera salido dejado asomarse. Cuando en verdad no quieres discutir algo no lo dejas ni asomarse… pero dejarlo asomarse es una provocación y dsps te haces el que la quieres evitar…
Por que la necedad de quedarse callado cuando es tan obvio que hay algo ahí dentro que te mueres por decir??
Quien es mas necio? El que discute diciendo que no le pasa nada cuando es obvio que si le pasa algo o el que pregunta aun cuando le han dicho que no pasa nada??
Les dejo unas frases sobre la necedad…
Decimos una necedad y a fuerza de repetirla acabamos creyéndola.
Voltaire (1694-1778) Filósofo y escritor francés.
No hay cosa más difícil, bien mirado, que conocer a un necio si es callado.
Alonso de Ercilla y Zúñiga (1533-1594) Escritor español.
Una necedad, aunque la repitan millones de bocas, no dejan de ser una necedad.
Anatole France (1844-1924) Escritor francés.
Presentando mi blog
Ok. Entonces aqui vamos, despegando... "el cocodrilo astronauta soy en orbita lunar", asi dice una canción de Enrique Bunbury que me gusta mucho y que dicho sea de paso se llama Lady Blue. A mi me suelen decir Babyblue.
Esta bien, no me voy por las ramas. Estoy presentando mi blog.
De donde salió todo esto? Bueno, la verdad es que fue idea de un amigo, y aqui estoy, escribiendo un blog para escribir mis pensamientos y compartirlos al mundo.
Que por que este nombre? Bueno, es una canción de Jarabe de Palo (sí, me gusta mucho la música, hablaremos de eso despues) y desde que la escuche me marcó esa frase... De segun como se mire todo depende.
Que si el blanco sea blanco, que si el negro sea negro, que uno y uno sean dos... depende! Por que depende? Porque el blanco tiene matices, el negro tb y uno y uno no siempre es dos (ya nos dijo Jeremías: uno y uno igual a tres, si dos ya no se entienden bien siempre habra un tercero para complacer... y dicho sea de paso que si hablamos de suma de vectores no siempre es dos)
En todo caso, la verdad es relativa. Depende de por donde se mire. Puede ser verdad de una forma pero mentira de otra... Casos y ejemplos? Miles, que no me voy a poner a detallar ahora... los ire detallando a medida que vaya escribiendo en este lugar.
Pues bien, en fin, es como dije, para presentar al mundo mis pensamientos, quizas muchos no esten de acuerdo con lo que digo, pero eh! Depende. Depende del punto de vista de la persona. Estar de acuerdo con algo o no. Igual los comentarios seran bienvenidos (si es que alguien lee esto no?)
Esta bien, no me voy por las ramas. Estoy presentando mi blog.
De donde salió todo esto? Bueno, la verdad es que fue idea de un amigo, y aqui estoy, escribiendo un blog para escribir mis pensamientos y compartirlos al mundo.
Que por que este nombre? Bueno, es una canción de Jarabe de Palo (sí, me gusta mucho la música, hablaremos de eso despues) y desde que la escuche me marcó esa frase... De segun como se mire todo depende.
Que si el blanco sea blanco, que si el negro sea negro, que uno y uno sean dos... depende! Por que depende? Porque el blanco tiene matices, el negro tb y uno y uno no siempre es dos (ya nos dijo Jeremías: uno y uno igual a tres, si dos ya no se entienden bien siempre habra un tercero para complacer... y dicho sea de paso que si hablamos de suma de vectores no siempre es dos)
En todo caso, la verdad es relativa. Depende de por donde se mire. Puede ser verdad de una forma pero mentira de otra... Casos y ejemplos? Miles, que no me voy a poner a detallar ahora... los ire detallando a medida que vaya escribiendo en este lugar.
Pues bien, en fin, es como dije, para presentar al mundo mis pensamientos, quizas muchos no esten de acuerdo con lo que digo, pero eh! Depende. Depende del punto de vista de la persona. Estar de acuerdo con algo o no. Igual los comentarios seran bienvenidos (si es que alguien lee esto no?)
Suscribirse a:
Entradas (Atom)